Alzheimer en adultos mayores
El entrenamiento cognitivo potencia las habilidades afectadas por el alzheimer en las personas mayores
La enfermedad de alzheimer en adultos mayores afecta la memoria, el pensamiento y el comportamiento de las personas mayores, avanza inexorablemente, haciendo que las personas con la enfermad olviden poco a poco los conocimientos adquiridos durante toda su vida e interfiriendo con el recuerdo de incluso la más simple entre las actividades cotidianas, olvidar los nombres de los miembros de su familia.
El ejercicio ayuda a disminuir los efectos del alzheimer
Las investigaciones han descubierto que la pérdida de reserva cognitiva puede reducirse si se ejercita adecuadamente.
Una de las causas del alzheimer en el adulto mayor es la interrupción de la forma en que las cargas eléctricas viajan en las células, así como la acción de los neurotransmisores. Esto provoca un entorpecimiento en la comunicación entre las células nerviosas, lo que afecta a diversas funciones del cerebro.
A pesar que pueda existir predisposición genética para padecer alzheimer, se puede ayudar a retrasar tanto la aparición como las fases del mismo a través de la práctica de ejercicios mentales. También algunos hábitos de vida saludable pueden ayudar a mantener nuestro cerebro joven y reducir el riesgo de padecer alzheimer.
- Estimulación Multisensorial: activar los sentidos con estímulos visuales, aromas, diversas texturas, colores, movimientos y sonidos.
- Orientación a la Realidad: ubicar a la persona en el tiempo, lugar y espacio.
- Reminiscencia: fotografías, música, artículos del pasado, objetos culturales y de la infancia, estimulamos la memoria episódica y autobiográfica ayudando a conservar la identidad de la persona.
- Lectura-escritura: la comunicación oral, escrita, y el proceso de codificación pictográfica.
- Cálculo: actividades y juegos matemáticos.
Como no existe una cura definitiva, una detección temprana del alzheimer en adultos mayores es ayudará a disminuir sus efectos negativos. A través de entrenamiento el cerebro puede desarrollar nuevas conexiones neuronales que a su vez, forman más conexiones. Aunque no hay nada que garantice la prevención de la demencia, sí se puede ayudar a la persona afectada a poner en marcha ejercicios que ayuden a disfrutar de autonomía y una vida plena por más tiempo.
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