Parkinson en el adulto mayor
La enfermedad de Parkinson se considera la segunda enfermedad neurodegenerativa más dominante
El parkinson en el adulto mayor es una enfermedad neurodegenerativa, esta afecta a un conjunto de trastornos que se originan en la pérdida progresiva de las neuronas, las neuronas más afectadas, son las dopaminérgicas estas se encuentran en la zona del cerebro llamada sustancia negra, cuyo neurotransmisor principal es la dopamina y son las encargadas de la coordinación del movimiento, el equilibrio, el mantenimiento del tono muscular y la postura. El curso de la enfermedad es crónico y paulatinamente gradual.
La enfermedad de Parkinson se considera la segunda enfermedad neurodegenerativa más dominante, después de la enfermedad de Alzheimer, muchos adultos mayores están aún sin diagnosticar con esta enfermedad, ya que se desconoce la fuente que provoca la enfermedad, se cree que es el fruto de múltiples elementos que actúan a la vez, se encuentra el envejecimiento, la vulnerabilidad genética y las exposiciones ambientales.
Esta enfermedad es más frecuente en la tercera edad, afectando especialmente a las personas que se encuentran en el rango de edad de 40 a 70 años.
Síntomas de parkinson
Los síntomas de parkinson suelen ser asimétricos y engañosos, algunos de los síntomas son:
- El temblor en reposo, pero en momentos suele no existir.
- Provoca episodios de pérdida del equilibrio, con riesgo de caídas.
- Es habitual la pérdida de expresión facial.
- En algunos pacientes se manifiestan cuadros depresivos asociados.
- También son frecuentes episodios de estreñimiento, exceso de sudoración y de producción de saliva.
- Los movimientos voluntarios se hacen lentos, existe una clara rigidez muscular y se producen alteraciones de la marcha, con tendencia a arrastrar los pies y a bracear menos.
El parkison en el adulto mayor se manifiesta de forma diferente en cada persona. Por esta razón existen tantas variedades de esta enfermedad como personas lo padecen. La enfermedad de parkinson varía tanto en síntomas como en la evolución de la enfermedad o la respuesta a los tratamientos y a las terapias rehabilitadoras, lo que hace necesaria una atención personalizada.
Los cuidados del adulto mayor con la enfermedad de parkinson, principalmente son conocer los síntomas, aprender acerca de la enfermedad ayuda a evitar posibles problemas en el futuro y a realizar mucho mejor la labor:
- Para evitar una caída es recomendable usar bastón o caminador, pues la inestabilidad es uno de los principales síntomas del parkinson.
- Asegurarse que en el lugar por donde camine, tenga una buena iluminación y no tenga muchos obstáculos en el espacio como sillas, muebles, etc.
- Vigilar la medicación estando pendiente de que siempre la tome a las horas adecuadas y con la suficiente agua. Siempre consulta al médico antes de empezar con cualquier tratamiento.
- Instale una silla dentro de la ducha para que el paciente pueda sentarse, esto hará el baño mucho más sencillo para los dos.
- Proteja la piel del adulto mayor con una crema humectante para evitar el exceso de sequedad en las zonas de prominencias óseas.
- Para los escapes de orina, es recomendable utilizar productos adecuados.
Finalmente existen ejercicios que podrá afectar positivamente al adulto mayor con parkinson, permitiéndole llevar una vida más tranquila y llevadera con las personas que lo rodean, estos son:
- Realizar ejercicios para optimizar la deambulación caminando sobre una línea recta con buena biomecánica y evitando caer para adelante.
- Ayudar en la coordinación con los lanzamientos de pelota a una o dos manos y la coordinación bimanual.
- La mejora de la postura puede lograrse con ejercicios de realineación postural y de respiración.
- Ser consciente del cuerpo y trabajar en la propiocepción (conocimiento de dónde se encuentra cada segmento del cuerpo en el espacio) ayuda mucho.
- Finalmente, darle volumen de actividad física creciente, que puede lograrse, además de caminando, pedaleando en bicicletas fijas.
En Hogar Día Mi Casa brindamos grandes beneficios enriquecedores en la salud del adulto mayor, tanto para familiares como cuidadores.